Hoy tendría que estar en París, en el Père-Lachaise. Lamentándome a la punta de una tumba, que también es mía, aun antes de yo haber nacido. Pero yo nací en el lugar equivocado y 40 años más tarde. Solo queda una nostalgia prestada, no vivida, unos ajenos recuerdos virtuales de lo que ha sido y me hubiera gustado vivir.
El destino quiso que yo tenga 27 años en el 40 aniversario de la muerte del Rey Lagarto. Desde hace mucho tiempo me veía ahí, en su tumba (como lugar simbólico, desde ya), algo dije en uno u otro post. O al menos en el Whisky a Go Go; pero no pasó nada de eso...
Un «Blue Bus» llamándome un «Blue Sunday», Mister Mojo Risin'.
40 años después de un lustro de gloria. Y ahora la eternidad parece tan poco tiempo.
Ayer me veía bailando danzas indígenas en medio de un lisérgico éxtasis, hoy me veo bajando las colinas. Me mantuve por la autopista, yendo hacia el Oeste, cabalgando...
Pero en algún momento, estúpidamente, me perdí.
Let it roll, baby roll, the future's uncertain and the end is always near. Let it roll, baby roll...
Cabalgué la autopista hacia el Oeste, bajo la luz de la luna, durante un buen tiempo; pero en algún punto me perdí... He estado abajo tanto maldito tiempo que todo aquello parece demasiado alto para mí...
Recuerdos que no me pertenecen y otros que miro lejanos. De cómo la admiración por un ídolo me cambió la vida. No es algo que pueda racionalizarse y no es que eso me preocupe, tampoco me da pudor reconocerlo, y no es que vea algo malo en eso. Sobretodo cuando una mano mística viene a rescatarte. Desatar el nudo, desenredar ideas y sueños, para luego llevarte en un viaje.
The end of nights we tried to die,
This is the end...
Wake Up!
Si bien soy un tipo medianamente educado, en ocaciones me pregunto por qué los seres humanos tenemos tantas reglas para realizar tareas cotidianas que no merecen tanta atención ni exigencia. Lo primero que viene a mi cabeza es el ritual para el almuerzo y cena, hay tantas formas distintas para comer que resulta ridículo, desde la brutalidad aparente de hacerlo directamente con nuestras propias manos hasta doce cubiertos y servilletas ubicadas delicadamente en el regazo. Para graficar esto vale el piropo callejero (poco romántico, por cierto): «Está más buena que comer el pollo con las manos»
Hay pasos a seguir impuestos culturalmente que nos prohíben ciertas conductas a la hora de sentarnos a comer y tantas otras situaciones a las que nos enfrentamos como ciudadanos en una sociedad.
Yo creo que en Argentina esto no se hace, pero como lo veo mucho en peliculas extranjeras debo suponer que hay gente en el mundo que sí lo hace: Me refiero a rezar y dar las gracias a algún Dios antes de comenzar a comer. Jamás presencié esta escena en persona, pero de tocarme, debería esperar que realicen estas cuestiones religiosas por más ateo que yo sea y por más hambriento que yo me encuentre; sería una completa falta de educación que yo diga «Que rico estuvo todo, me llené» mientras los demás dicen «Amén». Y no precisamente para darme la razón a mí, sino por haber terminado su oración religiosa para dar comienzo al banquete.
De todas formas voy a dejar cuestiones religiosas de lado, pues debo necesariamente saltearme el judaísmo, islamismo y demás ya que no son cercanas a mi cultura y me temo que poco entiendo. Además debo ser sincero (por más que ofenda a alguien), me resultan muy ridículos muchos de sus preceptos culinarios, fundamentalmente la comida Kósher.
El nivel de civismo de una persona es proporcional a las vueltas y artimañas que haga antes de comer un bocado. Eso es cruel, hombre. Es decir, cuanto más se prolongue la ingesta del alimento, más educado será el comensal. Por otra parte, nos encontramos con que las porciones son pequeñas, pues lo importante es degustar y provocar al gusto, complaciendo nuestro paladar, produciendo fino placer, en lugar de llenarnos el estomago cayendo a las bajezas que significaría dar placer a un órgano tan infame. ¡Pero yo tengo hambre, quiero comer!
Cubiertos de acá, allá, copas para esto y aquello, entremeses, servilletas, manteles, platos, botellas, envases, jarras, posiciones, codos debajo sin apoyarse en la mesa, correcta ubicación de la silla, levantarse frente a una dama, acercarle la silla a la dama, postura correcta y erecta, no decir obscenidades ni hablar con tono vulgar o sobre temas delicados, no eructar ni hacer otras necesidades corporales mucho menos agradables, escuchar atentamente, mantener el dialogo pero sin hablar con la boca llena ni la cabeza vacía.
Si hay algo que le falta a las traducciones automáticas lógicamente es el complemento humano. Es decir, nos puede dar una traducción aproximada, pero no puede ir más allá de unas pocas palabras, a menudo ni siquiera una oración llega a quedar coherente.
Tomemos por ejemplo: «Me encanta leer Memilandia a la mañana, mientras desayuno». Algo sencillo que para el traductor de Google en inglés se escribe así: «Memilandia I love reading the morning as breakfast.» Un disparate, algo así como: «Memilandia me encanta leer la mañana como desayuno» (?)
Ahora imaginense el resultado que daría si lo aplicamos a toda una página o post, más de uno habrá intentado hacerlo con el traductor del navegador y habrá notado bochornosos resultados.
Esto en vista de que influye mucho el sentido y el contexto de las oraciones dentro de un escrito que solo una persona podría notar con precisión. Estoy diciendo una inmensa obviedad, pero muy pocos se detuvieron a pensar realmente cómo solucionar este problema. Pues bien, Luis von Ahn sí lo hizo. Su idea fue crear, junto con su equipo: Duolingo. Consiste basicamente en que las personas se encarguen de traducir «toda» la web, tan simple como eso. Ok, hay más...
¿De dónde van a salir los voluntarios para tan ambicioso proyecto?
Está claro que nadie va a hacerlo gratis y la lista se reduce aun más si tenemos en cuenta a aquellos que realmente pueden traducir, es decir a los bilingües.
La mejor manera es cambiando el enfoque y dirigirse exclusivamente a otro sector, a las personas que en este momento está aprendiendo otro idioma (se estima que cerca de un billon) y qué mejor manera de aprender un nuevo idioma que traduciendo. En propias palabras de su creador: «La solución fue transformar la traducción en algo que millones de personas quieran realizar, y que ayuda con el problema de la falta de bilingües: el aprendizaje de idiomas [...] Duolingo será %100 gratuito, un lugar en donde las personas van a aprender ayudando a traducir la Web. Es decir, van a aprender haciendo».
Sencillamente genial, no solo no van a pagar un peso, sino que además se ofrece como un servicio gratuito para aprender otro idioma. Esto demuestra como un «simple» cambio de enfoque a un problema ayuda a resolverlo, de esta forma, Duolingo se enfoca exclusivamente a aquellos que desean aprender. Todos ganan.
Por ahora se están realizando pruebas y en unas semanas estará disponible la beta privada. Yo ya me suscribí por mail y sigo el proyecto en twitter.
Ahora bien, esta idea de aprovechar lo que la gente hace en internet no es nueva para Luis von Ahn, este genio guatemalteco es reconocido mundialmente por haber inventado el captcha y re-captcha que sirve para digitalizar los libros de Google. Cada palabra ilegible que nos aparece en ese molesto recuadro no es más que una palabra que ha sido digitalizada de algún libro y necesita la ayuda de un humano para ser entendida correctamente. Otra genialidad por parte de este muchacho. Eso no es todo, anteriormente había creado un juego para etiquetar imagenes, muy ingenioso. Y dado que esos dos proyectos fueron comprados por Google al poco tiempo, todo indica que Duolinguo será adquirido en no mucho tiempo por Google.
Las aplicaciones prácticas que se le pueden dar son increibles, traducir videos, páginas, blogs importantes, periódicos en otros idiomas y demás, pero fundamentalmente Wikipedia. En principio comenzarán con soporte para inglés, español, alemán y francés; luego irán ampliando hacia al menos, los 20 idiomas más hablados del mundo.
Sea como sea estoy ansioso por ver cómo le va a este proyecto y deseando, de momento, que podamos tener tan buen contenido en Wikipedia como en la versión en inglés. Para quien no sepa el dato: El contenido de la versión en español de Wikipedia es un mísero %10 de la versión en inglés.
Via: TechCrunch.
Ya pasaron 5 años. Este día del año 2006 escribí el primer post de este blog. No puedo dejar de verlo sin algo de vergüenza, pero aún así fue el primero. No tendría por qué avergonzarme, de hecho alguna vez usé pañales y me cagué encima; el paralelismo es el mismo. Por aquel entonces poco conocía internet, no entendía el concepto de publicar cosas por la web, mucho menos el concepto de blog. Para mí todo se trataba de «páginas» (estáticas). Pero es entendible, en mi casa no usaba internet, si lo hacía era a través de un mísero módem de 56 kbps (ese que cuando uno usaba internet el teléfono daba ocupado).
Aunque mis andanzas en internet comenzaron en el 2000 con AOL, era bastante torpe para comprender todo lo que significaba la web. Yo solo chateaba en las salas de AOL y leía alguna que otra noticia. Por entonces ver imágenes era un lujo y era habitual bajarlas al rígido para poder verlas cuando uno quiera. Luego comenzaron a aparecer ciber cafés por todos lados con banda ancha, con la «despampanante ultra velocidad» de... un mega. Recuerdo que me preguntaba: «¿Para qué tanto?». Bueno, ahora lo se y no me bastan tres.
A medida que internet evolucionaba yo me iba quedando al margen, hacía otras cosas y le daba poca importancia. Durante ese tiempo, una tarde cualquiera, creé casi por accidente este blog, con este mismo titulo que nunca cambié. Pero ahí quedó todo, no lo volví a tocar hasta pasado un año en que una amiga me dijo «Deberías publicar las cosas que escribís en un blog». Entonces eso hice, ahora más familiarizado con todo esto podría empezar a publicar las cosas que escribía (que no tenían ningún fin más que entretenimiento propio, onanismo literario). Al querer crear la cuenta en Blogger descubrí que ya había creado una cuenta y que de hecho ya tenía blog, este mismo. Fue como encontrar un viejo juguete de la infancia que había olvidado por completo.
Entonces comencé a postear algunos escritos, cuentos y otras pocas cosas. Con el tiempo fui entendiendo de qué se trataba internet. Me gustaba y me gusta tener un blog en donde digo lo que quiero y comparto con gente de todo el mundo ideas, pesares, inquietudes, puntos de vista y un enorme etcétera...
No podría elegir un post preferido pero de muchos disfruté al escribirlos; pero decir eso no dice mucho en realidad, pues todo lo que escribo lo hago porque me gusta. No hay muchas vueltas con eso.
Tal vez la serie de la maquina del tiempo, la serie sobre la moral o algunas otras ideas algo descabelladas que se me cruzaron por la cabeza y en su momento parecían interesantes como: el concepto de nada, un nuevo calendario, usar lenguaje ateo, publicidad en la luna, inquietudes de la infancia, el futuro de los historiadores, sobre viajar al futuro, sobre escribir una carta al futuro entre tantas otras cosas...
No obstante debería decir que son 5 años un poco falsos, tendría que empezar a contar a partir de abril del 2007. Aun con esto, creo que es justo decir que este blog tiene 5 años, después de todo hay meses en los que no publiqué nada, si tal es el caso debería restarle también esos meses y hasta esos días que no publiqué, no tendría mucho sentido.
He conocido demasiada gente, de todas partes del mundo, he intercambiado opiniones y consejos de todo tipo. Fue (y sigue siendo) un verdadero placer. Se que es cursi y meloso decirlo, pero: Agradezco enormemente a todos los que alguna vez participaron y comentaron en este blog, así como aquellos que lo leyeron o lo leen.
En fin, creo que no puedo quejarme más de lo que lo hago habitualmente. Tener un blog, este blog es algo muy bueno y me hace mucho bien.
Y por unas palabras soy feliz...
![Paradoja: Una Imagen vale más que mil palabras. [Una Imagen vale más que mil palabras]](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWl_PpGGzVavxlOtDOvg2un-zTrm3otmaxvCTAJk0rK5bhYuCzSO0hd5kYHhlYjSLU9wJPb7LQoa0no8lsb4TWHtIAzTnuu8bKc8vjktsDIKOX6gxIadvsE5Fu8vaPLYdo__LPUg/s640/Una-imagen-vale-mas-que-mil-palabras.png)